El cierre de la brecha digital puede tener varias soluciones, pero una de ellas destaca por su capacidad de cubrir grandes extensiones a un costo accesible: las soluciones satelitales. La conectividad satelital se está expandiendo en América Latina y Argentina como una forma de llegar a zonas desconectadas.
El desarrollo de las telecomunicaciones satelitales es imprescindible para maximizar la disponibilidad de las tecnologías de la comunicación y la información. La principal ventaja del servicio satelital es la posibilidad de alcanzar áreas remotas o de difícil acceso, en donde el despliegue de una red terrestre es inviable técnica o económicamente. Además, el despliegue de los servicios en tierra es mucho más rápido que el de otras tecnologías terrestres.
Con las nuevas tecnologías satelitales, los satélites son más capaces de ofrecer servicios de calidad y llevar conectividad hacia los no conectados. De acuerdo con la Asociación de la Industria Satelital (SIA) la economía la innovación tecnológica permitió mayores velocidades de conexión y capacidad de datos, potenciando los ingresos globales del sector en un 19 por ciento en 2019.
Satélites en banda Ka
Una de las mayores innovaciones en el mercado satelital es la banda Ka que abre la puerta a las compañías satelitales a ofrecer un servicio similar a la banda ancha hogareña de forma directa. La banda Ka surge como una solución a la congestión de espectro en otras bandas y ofrece ciertas ventajas a las soluciones tradicionales. Imnarsat detalla:
- Alta capacidad de transmisión de datos a través de la reutilización de frecuencias, múltiples haces puntuales estrechos y aumento de la potencia de la plataforma satelital, llegando a ofrecer 100 Gbps en el conjunto de sus transpondedores
- Antenas de menor tamaño, rápido despliegue, fácil utilización y menor costo.
- Ubicuidad en toda la zona de cobertura satelital
- Escalabilidad aprovechando la adaptación de la demanda de tráfico y necesidades de los usuarios
- Fiabilidad, flexibilidad en la evolución de la red con nuevas tecnologías
- Técnicas de mitigación de atenuación de lluvias a fin de garantizar la disponibilidad de servicio.
La combinación con Wi-Fi para zonas remotas
En América Latina, muchas compañías están intentando llegar con conectividad satelital a zonas remotas. Un modelo que se ha expandido en los últimos años es el uso de Wi-Fi como complemento al enlace satelital. Se trata de un modelo que, en vez de llevar banda ancha a cada uno de los hogares desconectados, busca una tienda o centro de una comunidad aislada y se despliega allí su Wi-Fi, que luego se comercializa a los usuarios a través de paquetes basados en la descarga de datos o tiempo. Es decir, las personas deben acercarse al punto de venta para comprar un código de acceso y conectarse a la red.
Una de las primeras experiencias de este tipo fue la de Viasat en México que junto con un socio local desplegó zonas Wi-Fi en sitios desconectados para que los habitantes puedan acceder de forma compartida a la red.
Otro actor que trabaja en un servicio similar es Facebook que tiene desarrollada la tecnología de Express Wi-Fi, que permite también la conectividad en zonas aisladas complementando el satélite con la solución Wi-Fi en tierra. La compañía ya está trabajando en países como India, Indonesia, Kenia, Nigeria, Tanzania y, en América Latina, tiene acuerdos con Hughes para México, Colombia, Perú y Brasil. Además, participa de algunos proyectos con Viasat. Facebook tiene desplegados cerca de 3.700 puntos en América Latina de su solución Express Wi-Fi.
Satélites de órbita baja y media
O3B es el nombre de una compañía pero también es una sigla de Other three billions (los otros tres mil millones), la cantidad de personas que se encuentran desconectadas en el planeta. Con foco en los desconectados, la empresa satelital fue pionera en satélites no geoestacionarios para ofrecer conectividad de banda ancha. La compañía fue comprada por SES para ofrecer una solución híbrida que combina satélites de órbita media de la constelación de O3B con los tradicionales geoestacionarios.
A medida que los satélites se acercan a la Tierra, se pueden alcanzar servicios similares a los terrestres, con mayor velocidad y menor latencia. Muchas empresas están trabajando en constelaciones de órbita baja para ofrecer conectividad de banda ancha satelital. OneWeb es una de ellas que luego de haber presentado la bancarrota toma un nuevo impulso con la inversión de Bharti Global y el Gobierno británico.
SpaceX con su proyecto Starlink también está trabajando en una constelación de órbita baja con un plan para llevar al espacio hasta 42.000 satélites. Amazon es otra de las empresas que está trabajando en iniciativas similares con el objetivo de conectar el mundo a través de satélites no geoestacionarios.
La combinación con redes móviles
Así como los satélites se combinan con Wi-Fi, existe una oportunidad de combinar las capacidades de los satélites con las redes terrestres 5G, ofreciendo un mejor ecosistema de conectividad para zonas aisladas. Con mayor capacidad y menor latencia, los satélites se vuelven capaces de complementar las redes terrestres y ofrecer backhaul para las redes móviles en zonas dónde los operadores no pueden llegar con alternativas terrestres.
La transformación de los satélites permite nuevas soluciones de conectividad para alcanzar con mejores servicios a poblaciones desconectadas. En complemento con Wi-Fi y 5G, se muestran como una solución costo-efectiva al cierre de la brecha digital.